El arte es una lucha, entrevista con Belin 

León, Guanajuato

Arte y Tendencias

El arte es una lucha, entrevista con Belin

Por Jorge Flores   14/06/21

El arte es lucha; en la calle, frente a muros derruidos, edificios en abandono y el incógnito límite de las leyes, los artistas luchan, batalla tras batalla, entre un trazo de rabia y otro de talento declaran que el mundo es su lienzo.

En 1979, en Linares (España) nació Miguel Ángel Belinchón. Ahí, en una pequeña ciudad de menos de 60 mil habitantes, donde no sucedía nada, donde no se podía hacer nada, el Miguel adolescente tomó un bote de pintura y con sus dibujos se apoderó de las calles. Hoy es una de las figuras más importantes del arte urbano en el mundo, vino a León en 2012 invitado por el Instituto Municipal de la Juventud y dejó su marca aún impresa en un mural que decora el cruce de Mariano Escobedo con Paseo de Jerez. En entrevista con Revista Cultural Alternativas nos platicó un poco de esta lucha interminable del arte y la calle. 

“Cuando conocí el grafiti y vi que la gente podía pintar las paredes fue cuando me enamoré del espacio, porque ya no me limitaba a pintar en papel o en el colegio, sino porque yo podía pintar en una pared grande”, cuenta Belin recordando cómo fue que encontró en el arte urbano su destino. 

RCA: Eres un artista autodidacta, ¿qué tan importante fue para tu carrera esta decisión?

B: Yo creo que lo más importante de ser un artista autodidacta es que haces lo que quieres, no tienes a ningún profesor encima que te dice «esto sí, esto no, ahora esta es la tendencia o esto ya pasó de moda o así no pintes», ser autodidacta te regala esa libertad de poder expresarte como quieras y que nadie te diga si está bien o está mal. Con el tiempo uno mismo va aprendiendo a diferenciar lo que es bueno y lo que es malo. A mí no me gusta que me dirijan, a mí me gusta hacer lo que me da la gana, a mí realmente no me gustan las tendencias. Fíjate ahora que lo últimos años estoy mezclando el cubismo con el realismo y con el arte urbano, y si te das cuenta el cubismo ya tiene más de 100 años, no es la vanguardia en este siglo pero es que no me importa porque yo creo que se puede seguir siempre descubriendo cosas nuevas en cosas que ya pasaron. Yo quiero hacer lo que a mí me gusta, con lo que yo me siento cómodo y creo que voy por el mejor camino.

RCA: Esa libertad, ¿requiere también un compromiso con tu trabajo para no perderse?

B: Sí, yo creo que sí; al final lo más importante es el compromiso conmigo mismo como artista. Pienso que hay muchos artistas que lo que hacen es pintar lo que más se vende, «si esto me funciona lo repito tantas veces como pueda para que me dé más dinero». Pero un artista que es autodidacta y trabaja más desde su interior sin que nadie la haya dirigido, no busca vender más o vender menos, busca sacar lo que tiene dentro; entonces cada día habrá un color diferente en tu obra. El artista, el verdadero artista no es otra cosa que un tío que se pelea todo el rato para poder aprender y aportar al mundo del arte, yo creo que la visión de un artista es aportar y para aportar hay que evolucionar.

RCA: ¿Qué tan importante fue tu ciudad, Linares, para desarrollar tu arte?

B: Mucho, es una ciudad muy pequeña, tiene como 55 mil habitantes, esa cercanía de sitio y esa tanta diversidad de paredes y de espacio oculto donde no me veía la gente pintar me dio mucha facilidad para poder trabajar y crear mucho. Mi ciudad me dio la oportunidad del espacio para poder utilizarlo. Hay gente que en esta ciudad no tiene nada que hacer «porque aquí no hay nada que hacer, porque aquí todo es una mierda, porque aquí no hay futuro»; pero yo digo, cuando hay un sitio como éste en el que no existe nada, está guay porque entonces puedes crear algo y eso es lo que yo siempre he hecho en mi vida.

RCA: ¿Y qué tan importante es el arte urbano para una ciudad?

B: El arte urbano le da identidad, personalidad, le da cultura gratuita, hace que un niño que crezca en una ciudad con arte en la calle desarrolle su sensibilidad, va a saber apreciar, va a saber valorar y respetar el arte. El arte urbano es algo muy accesible porque en todos los barrios del mundo hay artistas urbanos, grafiteros que con poco hacen mucho, con poca materia prima pueden hacer obras de arte en la calle y eso es buenísimo para el ciudadano.

RCA: ¿En todos estos años de carrera, cómo ha cambiado la percepción del artista urbano en el mundo?

B: La evolución ha sido una pasada, es decir, chingona. Antes la gente decía «qué hacéis, por qué pintas ahí en las paredes, eso es ilegal, eso es vandalismo, eso es gamberrismo, eso es un delincuente». Me miraban mal compañeros míos, sus padres me miraban mal por la ropa que llevaba, por lo que yo hacía en la calle, que nunca hice nada malo ni me drogo ni nada, pero para ellos era muy importante la estética. Pero ahora, por ejemplo en Linares, el arte urbano, el grafiti es bandera, todo el mundo tiene el arte urbano como algo esencial en Linares, eso ha ido cambiando aquí y en todo el mundo; ahora ya hay murales en toda la ciudad y cuando hacen uno quieren más y más.

RCA: Para ti pintar es una lucha, ¿contra qué es, alguna vez se acaba esa lucha?

B: La lucha es constante, yo creo que nunca se acaba en la vida. Cada vez que acabo una obra quiero mejorar y evolucionar, es una carrera constante en la que nunca, nunca puedes descansar; y por qué una lucha, porque yo cuando me encuentro con un muro en blanco, un edificio, es una pelea que tengo personal para mí, eso que hago de encontrar el lienzo en blanco, ese momento de atacar, de empezar a pintar, de seguir trabajando es una batalla constante que no me deja dormir hasta que no termino; creo que es parte de mi droga, la droga que yo consumo es esta lucha, la necesito porque si no me siento como que no sirvo para nada, un fin de semana que no haga nada estoy así como respira ansiosamente necesito luchar, necesito luchar para seguir activo.

RCA: ¿Qué recuerdas de tu visita a León?

B: Yo no conocía León, Guanajuato. Cuando me invitaron del Instituto de la Juventud, la verdad fui a ciegas, no conocía a nadie y llegué; pero rápidamente me enamoré de la gente, eso fue algo inolvidable, hice buenos amigos con los que sigo teniendo contacto, amigos que han venido a Linares, que han pintado aquí en mi casa y con los que he visitado más sitios de México; eso es lo que más me ha gustado de allí, estuve cantando en karaoke canciones de Raphael que es un cantante de mi tierra de acá de Linares, estuve comiendo, estuve cantando, rapeando; no sé, fue algo espectacular de verdad.

RCA: Por último, la pregunta obligada ¿qué le recomiendas a los jóvenes artistas que se enfrentan a las dificultades y los estigmas que tiene el arte urbano?

B: Que tengan fe y que sean muy autoexigentes si quieren crecer; porque al final esto es una lucha constante, nada fácil, nada gratis, nadie te va a regalar nada, pero si tú crees en ti puedes conseguir todo lo que te dé la gana o por lo menos casi todo.

Este texto se publicó originalmente en la Revista Cultural Alternativas 129

 


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