Caroduls: Portavoz de la diversión artística 

León, Guanajuato

Arte y Tendencias

Caroduls: Portavoz de la diversión artística

Por Silvia Palacios   10/02/21

Existen personas que nacen con un talento y depende de ellas explotarlo. Carolina Durán sabe a la perfección cuál es el suyo y desde niña lo ha trabajado, lo ha desarrollado y ahora vive felizmente de ello.

Con tan solo 25 años, Silvia Carolina Durán López se ha posicionado en la escena del arte local y urbano. Su trabajo ha sido constante en León desde su regreso de Ciudad de México en 2017, donde por cuatro años estudió la Licenciatura en Artes en la Escuela Nacional de Bellas Artes; pero este paso fue la profesionalización de una pasión que comenzó desde la infancia.  

Con una sonrisa, Caro recuerda cómo desde los 5 años decía: «Yo quiero ser pintora», pues el diseño y el dibujo no eran ajenos en su vida. Su mamá, Silvia, se dedicó al diseño de calzado a pesar de haber estudiado Administración; entonces Caro veía cómo su madre diseñaba botas vaqueras que después aparecían en catálogos y revistas estadounidenses, además de que tenía infinidad de materiales para utilizar: pieles, pinceles, etcétera.

“Desde niña mi ‘iPad’ eran hojas y colores. De hecho llegó un punto en que mi mamá se preocupaba porque yo no hacía otra cosa, si me daba un bonche de hojas me podía quedar cuatro horas sentada sin hacer otra cosa más que dibujar”.

En un intento porque Caro conociera diferentes tipos de actividades, su mamá la metió a clases de karate y natación, pero no, lo de la pequeña era dibujar, esa era su vocación; ella incluso expresa que los deportes nada más no le gustaron, lo hizo por obligación, pero no se divertía como lo hacía con el dibujo.

A los 13 comenzó su intención de adquirir mayor técnica en las artes y como lo menciona, se hizo clienta de todos los talleres de artes que se impartían como parte de la Extensión Académica de la Universidad de Guanajuato en el campus Forum. 

Tomé grabado, pintura, dibujo, fotografía; tomé un montón de talleres hasta que cumplí 18 y fue momento de ir a la universidad”; y qué carrera estudiar, era claro: Artes. Así que con apoyo de un maestro de los talleres comenzó a armar su libro (requisito para entrar en la Escuela Nacional de Bellas Artes), y poco a poco fue superando cada una de las fases hasta ser admitida en la reconocida escuela. 

Pero eso, dice, sería lo más fácil, pues mantenerse en la carrera era más complicado y requería de un temple enorme. Así, pasaron 4 años y en 2017 regresó a León para comenzar a aplicar lo aprendido.

“No sabía qué hacer y empecé a pintar aquí en León; pintaba en la calle y quería que alguien más viera mi trabajo (...) Empecé haciendo arte urbano pegando pinturas en la calle”.

Sin saberlo, eso la llevaría a conocer a dos diseñadores (uno editorial y uno de diseño industrial), quienes la invitaron a trabajar juntos y fue entonces que surgió Sociedad Siniestra, un grupo de artistas enfocado en la ilustración que cada vez toma más renombre en la ciudad. 

En cuanto a su estilo, está dominado por las formas geométricas en un tono un tanto abstracto. “Cuando empecé en los talleres de la universidad (en el campus Forum) tenía una necesidad por demostrar mi habilidad también por mí misma, saber hasta dónde podía llegar técnicamente, entonces (empecé) a dibujar realismo, figuras muy concretas, muy elaboradas y estuvo bueno porque yo necesitaba tener todas las herramientas para después decir ok, tengo un menú de herramientas ahora puedo elegir las que me divierten, entonces las que más me divierten, técnicamente no son las más elaboradas, sino las que quiero pensar que tienen un proceso mental divertido. Para mí es un juego más divertido pensar cómo ir reduciendo los colores o las formas a figuras más simples”, asevera.

Y es que para ella hay un elemento que no debe faltar al momento de crear, y ese es la diversión.

“Casi siempre pasa que cuando pinto me estoy riendo, lo estoy disfrutando tanto que estoy riendo y se me hace súper fácil, el papel se me acaba como agua y son las formas más simples, como las ideas más concisas y creo que lo he pulido (su estilo) haciéndolo, porque la he regado mucho, pero pinto mucho, entonces trabajando, creo que esa ha sido la manera”. 

Ese mismo proceso es el que busca que sigan sus alumnos, pues además de crear obra por su cuenta, caroduls (como la encuentras en Instagram) imparte talleres infantiles y desde hace tres años forma parte del programa Jugando Soy, de la Secretaría de Educación de Guanajuato, que se da en escuelas públicas y en los que Caro forma esquemas de trabajo a partir de las artes y así, poder cumplir con una de sus máximas: “La pintura es un pretexto para el desarrollo humano”.

 “Para mí (Jugando Soy) me complementó mucho en la búsqueda que tenía con respecto a la educación en las artes, fue lo que deseaba, lo que anhelaba tener con respecto a los niños”, pero como toda artista proactiva, buscó en dónde más podía desempeñarse y fue así que regresó a su alma mater artística, la Universidad de Guanajuato.

Actualmente imparte talleres para niños en el mismo lugar en donde ella lo hacía en su adolescencia, solo que en modalidades diferentes. Incluso, también estuvo presente en la pasada edición de la Feria Nacional del Libro de León, Fenal 31, donde impartió el taller en línea ‘Diferentes e iguales: crea tu títere de papel’, ahí compartió crédito con Rosa Olivia Serrano. Caro menciona que le gusta impartir los talleres como a ella le gustaría tomar la clase, da tips y técnicas a los niños y niñas, ¡y claro!, la diversión no puede faltar.

Es ese mismo desenfado, frescura y persistencia, lo que la ha llevado a tener exposiciones colectivas con artistas a los que ella admira y con los que no se hubiera imaginado compartir espacio en galerías, tales como el español Alex Alessi y la veracruzana Wina. 

“Las oportunidades en artes es muy difícil pero creo que yo he tenido suerte, y en parte la suerte es porque trabajo mucho, más bien he buscado muchas oportunidades y me han llevado a conocer gente interesante, a compartir en espacios que yo no me imaginaba, me ha llevado a exponer junto a artistas que yo admiraba desde hace muchos años y que yo no me imaginaba que iba a estar en algún momento, no físicamente con ellos, sino nuestras obras en un mismo espacio”.

Ha expuesto en un par de ocasiones en la Torre que está sobre la Calzada Tepeyac y calle Roma, en el segundo piso de Estudios Nacionales, en varias casas del Centro de León y, junto con el colectivo Sociedad Siniestra, en el Taller Centro.

Esa tenacidad y esfuerzo no es en vano y Caro se está abriendo paso en el mundo de las artes en León, pero como todo artista, aspira a tener la oportunidad de dedicarse solo a producir y vender: “tener plena libertad de pintar lo que yo quiera y que esa sea la obra que más se me venda”; eso además de, ¿por qué no?, dar clases en alguna universidad. 

Y es que sin duda, para Caro no hay límites ni barreras. Es una chica con una actitud de frescura a la que bien le va pintar de forma única sus botas y lucirlas con estilo, es una chica que disfruta de ver Breaking Bad o escuchar Mi Banda El Mexicano y para quien un café nunca está de más; pero, sobre todo, es una artista con un futuro prometedor que ha sabido hacerse de conexiones y quien en un tiempo no muy lejano podría estar dando gratas sorpresas profesionales. 

Este texto se publicó originalmente en la Revista Cultural Alternativas 125


Historias Populares
Historias Recientes

Instituto Cultural de León

Oficinas Generales
Edificio Juan N. Herrera s/n
Plaza Benedicto XVI, s/n
Zona Centro
León, Guanajuato, México.

E-mail: prensaicl@gmail.com
Teléfonos: (477) 716 4301 - (477) 716 4899