Streaming: el desierto para la generación de audiencias 

León, Guanajuato

Cine y Escénicas

Streaming: el desierto para la generación de audiencias

Por Deusdedit Diez de Sollano    18/08/20

Como crítico de cine, una de las cosas más problemáticas a las que nos enfrentamos dentro de la labor, es por un simple cuestionamiento resultado de cuando uno se dedica a establecer el análisis profesional de una película. En espera de la conversación fílmica con las audiencias, la pregunta que va a demeritar el trabajo o generar un acceso de confort es: ¿está en Netflix?

Los resultados de Netflix son apabullantes si tomamos como muestra los datos que la empresa arrojó el año pasado[1]: Hay 61 millones de usuarios en Estados Unidos, mientras que a nivel internacional estos constan de 106.1 millones, el 59% de los usuarios de 16 a 34 años ya lo consideran un producto de canasta básica y el promedio de consumo de la plataforma es de dos horas al día. Netflix abarca el 65% del mercado del streaming, en parte por ser el pionero dentro del experimento de transmisiones por Internet tomando en cuenta que esto no era el inicio de su modelo de negocios, ellos se aproximaban al formato físico por correo y también porque han sabido posicionarse con producciones millonarias en todos los países que han conquistado. 

Los números nos darían a entender que Netflix y competencia ofrecen una gama de contenidos fructíferos, y que la película de nuestro agrado va a permanecer latente en el sistema, pero esta noción se desvanece de inmediato ante las problemáticas de la forma de consumo. Si revisamos las plataformas, encontraremos que la mayoría de sus contenidos tienen una tendencia a repasar las décadas de 2010 y 2000, periodos que para sus principales mercados representan la etapa de pubertad e infancia, de ahí en más la selección de productos ajenos a estos 20 años, no es gratificante. Ampere Analysis hace poco analizó los contenidos de las plataformas basándose en la separación de estos por décadas. El 81% de la programación de Netflix abarca películas de los 2010, el 9% va dedicado a los 2000, el 3% a los noventa, el 2% a los ochenta, y el 1% y 1% a proyectos de los setenta y previos a esta década, respectivamente; las demás plataformas también pregonan esta falta grave de productos ajenos a la generación del streaming, siendo el menos ofensivo HBO MAX, con un 4% y 12%, respectivamente.

Esto es muy preocupante, porque fuera de los números de éxito de Netflix y de la importancia cultural que ha tenido, deja muy claras las intenciones de consumo que jamás van de la mano con el interés por la de audiencias que puedan indagar más allá de las series que formaron parte de su crecimiento sociocultural, toda seña de interés falso en querer desarrollar hábitos críticos son arrojados por la borda sobre todo si tomamos en cuenta el uso premeditado de un algoritmo que define los hábitos de consumo de sus usuarios, quienes consumen bajo normas de interacción en redes y por los productos de moda, un algoritmo que además selecciona con favoritismo el número de reproducciones e interacciones, no precisamente la valía dentro de cada uno de este tipo de contenidos.

Casi todos los sitios de esta modalidad de reproducción son partícipes de este tipo de estrategias, salvo la excepción de sitios como Criterion Channel o Mubi, los cuales abogan por el uso más ético y formativo de sus audiencias a través de películas no arrojadas por el vómito de los números, sino por cómo se hacía antes: bajo la curaduría. Por ello, es una labor incesante y necesaria la de los espacios culturales y de entretenimiento cambiar la perspectiva de consumo, de más que retar, educar a las audiencias a buscar una película fuera de la comodidad de dos o tres apretadas de botón del control remoto, de apoyar a la curaduría que representa el máximo exponente de interacción humana en relación al cine y su audiencia, porque lo triste radica cuando preguntan si está en su sitio favorito y si no está, el mundo se cierra en una moderna caverna de Platón.

Netflix no quiere audiencias pensantes, quiere partícipes dentro de su fenómeno y si las cosas se mencionaran por cómo son, no habría tanto problema…aunque cuando de pronto ves a Harry Potter o a Chicas pesadas asociadas a los westerns de Sergio Leone en la sección de clásicos, te cuestionas en qué momento acabas de darte cuenta que no eres una pieza valiosa con gustos y razonamientos: eres un simple número.

Deusdedit Diez de Sollano. Crítico de cine radicado en la ciudad de León, Guanajuato. Escribe para Zona Franca y también en la plataforma del Festival Internacional de Cine de Guanajuato GIFF donde además labora como curador y partícipe del proyecto El salón de la crítica, que busca encontrar plumas referentes al oficio de crítica de cine en nuestro país.

 

Referencias

[1] Mansoor Iqbal. (2020). Netflix Revenue and Usage Statistics (2020). Julio, 2020, de Bussiness of Apps Sitio web: https://www.businessofapps.com/data/netflix-statistics/

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Este texto se publicó originalmente en la Revista Cultural Alternativas 120: bit.ly/Alternativas120


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