El cuerpo, sus adornos y sus lecturas 

León, Guanajuato

Cultura, Identidad y Patrimonio

El cuerpo, sus adornos y sus lecturas

Por Tania Pérez | Por Adrian Alarcon, accidentalbear.com   14/05/18

Es con el cuerpo que identificamos nuestra propia existencia y que manifestamos la cultura en la que estamos inscritos. A través de él y sus envolturas, transmitimos nuestros valores y contexto con elementos que pueden ser leídos e interpretados por los demás, como un anillo en el dedo de una mujer o un punto rojo en su frente, ambos hacen alusión a un estado matrimonial en distintas partes del mundo. 

Existen dos enfoques semióticos que buscan explicar el cuerpo como ente comunicativo, por un lado encontramos la corriente kinésica, que estudia los gestos y movimientos que crean un lenguaje corporal; y por otro, las teorías proxémicas que se enfocan en el propio cuerpo como signo, pero también como un lienzo donde se exteriorizan otros signos.

Este conjunto de signos y símbolos son analizados e interpretados por las personas a través de la recolección de referencias previas y la creación de la memoria colectiva, la que trabaja normalmente de manera inconsciente con la formación de estereotipos.

Por ejemplo, durante un estudio realizado en la Universidad de Guadalajara, por Paulina Reynaga Berumen y Carlos Vidales Gonzáles, se les mostró a alumnos de distintitas áreas, dos fotografías del mismo hombre, una con barba y otra donde aparecía rasurado y se les pidió que lo describieran.

Los estudiantes de carreras en Ciencias Sociales y Humanidades, opinaron que parecía ser una persona relajada e intelectual, con gusto por la música, actividades artísticas y el diseño; y aunque los alumnos de Ciencias Económicas Administrativas coincidieron con estas características, también agregaron descripciones como “no trabaja”, “no es ambicioso” y “fuma”. 

Estas descripciones están enmarcadas y representan la semiósfera, dinámica cultural o contexto social en el que están inmersos los alumnos.

Son los elementos o signos en particular que forman un estereotipo, los que pueden ser usados para romperlo, como a principios del siglo XIX cuando la afamada diseñadora Coco Chanel tomó una de las prendas más asociadas con la masculinidad, el pantalón, y la volvió un objeto capaz de identificarse con la mujer y la feminidad.

Como éste, existen muchos ejemplos de cómo el cuerpo se convierte según sus adornos y recubrimientos, en un fenómeno sígnico donde pueden observarse rasgos y características de una cultura tradicional, disruptiva o globalizada. ¿Qué leen los demás en ti? ❧

Texto publicado originalmente en la Revista Cultural Alternativas 94. El Cuerpo, sus adornos y sus lecturas.


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