En recuerdo de Javier Avilés 

León, Guanajuato

Cine y Escénicas

En recuerdo de Javier Avilés

Por Luis Meza   16/02/18

En la década de los noventa, el teatro leonés experimentó una renovación en propuestas y repertorios, a la que en buena medida contribuyó Javier Avilés, a quien recordamos a una década de su fallecimiento.

León ha sido desde hace varias décadas una ciudad con una activa vida teatral, animada durante un largo tiempo por diversas compañías amateur, que sirvieron como base de cultivo para propuestas que aspiraban al profesionalismo y la permanencia.

Una de las figuras clave en la renovación de la escena leonesa en la década de los noventa, fue el joven actor y director Francisco Javier Avilés Ortega, fallecido prematuramente el 17 de febrero de 2008, mientras pasaba por una de las etapas más fructíferas de su carrera: a pocos días de iniciar la temporada de ‘El ogrito’, su cuarta producción para el Programa Nacional de Teatro Escolar y a unos pocos meses de haber inaugurado la 28ª Muestra Nacional de Teatro, en Zacatecas, con su anterior creación para ese proyecto: ‘Arlequín: servidor de dos amos’.

Muchas cosas que ahora son habituales dentro de la práctica leonesa, eran incipientes o inexistentes hasta que llegó Avilés: montar a autores contemporáneos, apostar por la formación y entrenamiento permanentes, acudir a citas escénicas nacionales o internacionales, tener un foro propio y concebir montajes que alcanzaban las decenas de representaciones.

Javier Avilés llegó al escenario siendo adolescente, cuando se incorporó al Grupo Juvenil de Arte Cristiano (JAC), al que dirigió de 1989 a 1994, alternado su participación en el taller de teatro del Instituto Tecnológico de León, donde estudió Administración Industrial.

En 1994, el joven quemó las naves en el JAC para fundar, junto con la actriz Milleth Gómez, el actor Javier Sánchez y el diseñador Ernesto Herrera, el Taller de Teatro Luna Negra y comenzar a mostrar sus intenciones con un montaje memorable: ‘Háblame como la lluvia’, de Tenesse Wiiliams, que debutó en el II Festival Internacional de Arte Contemporáneo, en 1995.

Ese mismo festival recibiría en los dos años siguientes, puestas de Javier Avilés sumamente insólitas y vanguardistas, como ‘Final del juego’ y ‘La última cinta de Krapp’, contribuyendo a un ascenso vertiginoso de Luna Negra, que hiló tres primeros lugares consecutivos en la Muestra de Teatro Leonés, de 1997 a 1999.

La compañía de Avilés no estuvo exenta de momentos de crisis, pero pudo sobreponerse para recibir el siglo XXI con su propio espacio, que funcionó por varios años en la calle Independencia y para hacer su aporte a programas nuevos, como el de Teatro Escolar, para el que Javier Avilés montó dos de sus últimos trabajos, además de ‘La cabeza del dragón’ y ‘El Yeitotol’, en 2003 y 2004.

En apenas poco más de una década al frente de Luna Negra, Javier Avilés alcanzó a crear un mosaico de montaje capaces de consentir a la imaginación, suscitar reflexión, lanzar puyas irónicas y críticas hacia el mundo actual y, muy frecuentemente, estirar los límites del lenguaje y recursos del arte teatral. Razones, sólo algunas, para echarlo de menos.

 


Historias Populares
Historias Recientes

Instituto Cultural de León

Oficinas Generales
Edificio Juan N. Herrera s/n
Plaza Benedicto XVI, s/n
Zona Centro
León, Guanajuato, México.

E-mail: prensaicl@gmail.com
Teléfonos: (477) 716 4301 - (477) 716 4899