Territorios para explorar en la FeNaL 

León, Guanajuato

Literatura

Territorios para explorar en la FeNaL

Por Xosué Martínez y Karla Gasca   10/04/17

Leer te lleva a descubrir nuevos territorios. La Feria Nacional del Libro de León (FeNaL) celebra su edición número 28 con nuevos foros, otra distribución para sus eventos y una larga lista de invitados de primera, entre los que se encuentran: Amparo Dávila, Xavier Velasco, Gilles Lipovetsky y Santiago Roncagliolo. Aquí te presentamos un adelanto de lo que se avecina: 

 

Del 28 de abril al 7 de mayo el Poliforum León recibe la Feria Nacional del Libro 2017. El encuentro de libros, lectores y escritores cumple esta edición con algunas novedades como la distribución de los espacios tanto para eventos literarios como para los eventos artísticos.

Así es, nos encontraremos con nuevos foros y otra distribución para que los diferentes públicos tengan una mejor experiencia.

Leer te lleva…” es el eslogan que este año acompaña a la Feria, que nos llevará a cuatro territorios como el Placer lector, lo Fantástico, la capacidad de Transformación, y el Conocimiento y lo Académico.

En el mapa de este vasto territorio nos encontraremos con eventos ar­tísticos y culturales, presentaciones editoriales y los talleres renovados para niños y jóvenes. Pero también encontraremos nuevas propuestas como talleres espe­cializados para promotores de la lectura, de dramaturgia o para saber cómo se publica. Mesas de análisis sobre los premios de literatura alrededor del país, el papel de la mujer en la literatura, las edito­riales independientes y el cuento fantástico.

Y hablando de cuento fantástico, Amparo Dávila encabeza la lista de escritores que tendrán una presencia en la FeNaL. Xavier Velasco, el dueño de las punzadas estará en los pasillos de la feria, lo mismo que el peruano Santiago Roncagliolo, imperdible autor latinoamericano. Y para quienes se perdieron el año pasado la ligereza de la vida consu­mista, Gilles Lipovetsky regresa a nuestro país, ahora como uno de los protagonistas.

Antes de que el comité organi­zador de la Feria nos cuente todos los detalles, aquí te dejamos un adelanto sobre estas cuatro plumas y pensadores que nos ofrecerán lo extraordinario de su pensamiento en el país FeNaL:

 

Amparo Dávila 

Al igual que un fantasma que se asoma por detrás de las columnas de una hacienda, o a través de las ventanas de una casona antigua, la obra literaria de Amparo Dávila mantuvo un perfil bajo por largo tiempo, a pesar de ser considerada una de las mejores cuentistas mexicanas del siglo XX.

Dávila se inclinó por la fantasía y las letras desde muy temprana edad. Creció en un pueblo llamado Pinos en Zacatecas y fue la única sobreviviente de tres hermanos que murieron cuando aún eran niños. Por el pueblo desfilaban las carretas que llevaban a sus muertos, ya que no había ningún cementerio cerca. Fue así como Amparo se entretenía viendo pasar la muerte. Por temor de que sufriera el mismo destino de sus hermanos, sus padres la en­claustraron por un tiempo en la casa familiar, la más grande del pueblo, donde pasaba horas en la biblioteca de su padre. Como no sabía leer se entretenía viendo los dibujos de los libros y quedó aterrorizada con los grabados de Doré en La Divina Comedia, uno de los primeros libros que cayó en sus manos.

Asegura que sus terrores infan­tiles nunca estuvieron relacionados con imágenes fantasmagóricas o leyendas, sino con visiones del infierno, demonios y almas en pena, como lo asegura en una entrevista que realizó para el Fondo de Cultura Económica; -editorial que publicó sus cuentos reunidos en 2009 con cuatro de sus antologías de cuentos: Tiempo destrozado (1959); Música concreta (1961); Árboles petrificados (1977, Premio Xavier Villaurrutia de ese mismo año), y Con los ojos abiertos (2008, inédito hasta entonces).

Con apenas 22 años de edad, Dávila publicó su primer libro de poemas titulado: Salmos bajo la luna (1954); cuatro años después publicó Meditación a la orilla del sueño y Perfil de soledades; libros que llegaron a manos de Alfonso Reyes, quien la contactó para felicitarla por su labor literaria e insistirle en que lo visitara en la Ciudad de México. Fue así que la escritora de 26 años de edad, decidió trasladarse a la capital del país y trabajar como secretaria de Reyes, quien se convirtió en su mentor. Más tarde conoció al pintor Pedro Coronel con quien se casó y tuvo 2 hijas. En 1966 fue becada por el Centro Mexicano de Escritores.

Sus cuentos llegaron hasta Julio Cortázar, con quien mantenía correspondencia al igual que con Alejandra Pizarnik. Cortázar expresó su admiración y comparó su obra con la de Edgar Allan Poe, a pesar de que Amparo no lo había leído nunca. Frente a tal confesión Cortázar le regaló la traducción que hizo durante su luna de miel con Aurora Bernárdez.

En la actualidad es admirada por escritores como Cristina Rivera Garza, Vivian Abenshushan, Bibia­na Camacho, Bernardo Esquinca y Alberto Chimal por mencionar algunos, e incluso un premio nacional de cuento fantástico lleva su nombre.

Leer los cuentos de Amparo Dá­vila equivale a descubrir un mundo en donde la realidad y la fantasía se entremezclan de forma tan sutil que resulta difícil saber en dónde termina una y comienza la otra; un mundo construido a partir del rigor estético, perfección técnica y un vistazo al lado más oscuro del alma.

 

Xavier Velasco 

Después de 5 años, Xavier Velasco regresa a la FeNaL, y viene acompañado de su más reciente libro Los años sabandijas, novela que preserva el sarcasmo y la picardía que caracterizan a sus textos.

La popularidad de Velasco no se debe únicamente a su facilidad como narrador ni a las historias que maquila y que atrapan al lector desde la primera página. El magnetismo de este singular escritor proviene tanto de sus letras como de su personalidad. Amante del rock, el cine y la literatura, Velasco se ha hecho de una significativa cantidad de seguidores desde que Diablo Guardián salió a la luz hace ya 14 años. El ganador del Premio Alfa­guara de Novela 2003 continúa con las historias de golfos, encueratrices, matones, iluminados, travestis, chantajistas, pandilleros, leyendas de Hollywood, yuppies palancudos, convictos reincidentes y ratas de cuello blanco en su nueva entrega, bajo el cobijo de editorial Planeta. Pero estos no son los únicos temas en los textos de Velasco, quien también reveló escenas íntimas de su infancia en: Este que ves, 2006.

Xavier Velasco nació en la Ciudad de México en 1964 y adoptó la escritura cuando tenía 9 años de edad en respuesta al aburrimiento de las aulas escolares. En sus inicios trabajó como director creativo y editor de una revista de sociales y al mismo tiempo se desempeñó como periodista. Escribió durante 16 años en el suplemento ‘Sábado’ del periódico Unomásuno y publicaba regularmente en los periódicos: Novedades, El Universal, El Nacional, La Crónica, Milenio, Reforma y El País.

Xavier también es autor de Luna llena en las rocas (2000); El materialismo histérico (2004); Puedo explicarlo todo (2010) y La edad de la punzada (2012). En esta ocasión se da un clavado en el México de principios de los años 80 para narrar la historia de dos malandros: Ruby y Roxy, un apostador punk y un admirador del grupo The Police que se dedica a robar extintores. Más allá de la nostalgia por aquellos años, Ve­lazco refleja en una peculiar historia a manera de “road novel”, una realidad que ha cambiado en sus detalles, pero no en la esencia de los personajes corruptos de nuestro país.

El mismo se denomina “El bastar­do del Boom Latinoamericano” y un solo vistazo a cualquiera de sus textos confirmará al lector esta teoría.

 

Gilles Lipovetsky

Enfrentar la realidad tangible y desmenuzarla, es la activi­dad predilecta del filósofo postmoderno Gilles Lipovetsky, quien se mantiene apartado de los intereses vitales de una sociedad caracterizada por la cultura de masas para reflexionar acerca de lo efímero y lo frívolo. Para Lipovets­ky la creación debe ser prioritaria si se busca el equilibro en la era de la hípermodernidad, donde imperan el hedonismo y el consumismo.

El filósofo por excelencia de la modernidad y su postrimería, Gilles Lipovetsky, explora terrenos que pocos se atreven a pisar: el imperio de lo efímero; la sociedad del hiperconsumo; la sociedad de la decepción; la cultura mediática; la globalización; el individualismo; los nuevos tiempos democráticos y el capitalismo.

Su más reciente publicación: De la ligereza, explora la tenden­cia dominante del espíritu de nuestra época: una civilización de lo ligero, la miniaturización, la provisionalidad, la liberación de todas las ataduras, la evanescencia, la frivolidad y la virtualidad que recorre Occidente como expresión de deseos, aspiraciones, sueños, esperanzas y utopías.

Esta publicación ya había inundado el auditorio principal de la Universidad de Guanajuato en agosto pasado, dejando a una buena cantidad de seguidores colgados del live stream para no perder detalles de su charla. León será una nueva oportunidad de escucharlo, guiados de pensadores leoneses del tamaño de Héctor Gómez Vargas.

 

Santiago Roncagliolo

Desde los libros infantiles, pasando por los cuentos, obras de teatro, guiones, artículos periodísticos hasta novelas sobre la guerrilla en Perú, de donde es originario, Santiago Roncagliolo, brinca de un género a otro por miedo a quedarse más tiempo del necesario bajo un mismo techo literario. Para este escritor que no le teme al cambio, las vivencias son las sangre que circula entre las venas de sus páginas.

Con más de 150 mil ejemplares vendidos alrededor del mundo, traducidos en más de 20 idiomas, Santiago Roncagliolo exprime hasta la última gota de cada historia que aterriza en su mente y pasa por su imaginación, desde una mujer que recibe anónimos pornográficos, un niño que ve cadáveres y un gato que busca sexo de forma desespe­rada (Pudor, 2005), novela que fue llevada al cine por Tristán y David Ulloa; hasta un thriller sangriento cuyo trasfondo lo constituye la historia del conflicto armado entre la guerrilla de Sendero Luminoso y las fuerzas antisubversivas del estado del Perú.

A partir del 2013 comienza a explorar los medios digitales, la novela Óscar y las mujeres (Alfagua­ra, 2013) en una edición digital y a través de 9 entregas.

Roncagliolo vale la pena ser leído porque sus historias atraviesan con­tinentes y sus personajes se posan en los espejos donde nos miramos todas las mañanas.

 

Texto publicado en la Revista Cultural Alternativas N83 Abril 2017 

 

 


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