Las chicas pintan mucho, la tinta del humor femenino

Las mujeres están en todo y en el mundo del cómic han salido a flote compartiendo momentos de la vida cotidiana que podrían resultar agobiantes pero han sabido verlo con humor y así lo plasman. Este es el caso de autoras como Agustina Guerrero, Sussanna Martín, Alejandra Lunik y Sara Fratini, quienes han logrado un gran alcance gracias a las redes sociales.

El ingenio de las mujeres ilustradoras no tiene límites. Las podemos ver burlándose de situaciones terribles e inevitables como es el síndrome premenstrual, sin cometer el error de encerrarse en el cliché de la femineidad, o narrando situaciones que podrían parecer irrelevantes como las compras en el supermercado o el encuentro fortuito con algún ex, pero para ellas resultan un material creativo que no se agota.

La empresa francesa Fnac ha logrado reunir el talento femenino del cómic en un libro con prólogo de Liniers y un epílogo de Joaquín Reyes, donde cada una de las artistas invitadas realizó una historieta de dos páginas. Bajo el título de ‘Las chicas pintan mucho’  figuran nombres como: Mamen Moreu, Moderna de Pueblo, Ana Belén Rivero, ‘Las rayadas’, Laura Pacheco, ‘P8ladas’, ‘Diario de una volátil’ de Agustina Guerrero, Susanna Martín, Maitena, Ana Purna, ‘Monstruo Espagueti’, Alejandra Lunik, Pedrita Parker y Sara Fratini.

Este libro se obsequia  en la compra de 20 Euros en Cómics a través de Fnac (tienda especializada en la venta de artículos electrónicos, ordenadores, artículos fotográficos, libros y música). Sin embargo, para aquellas personas a las que les resulta poco probable hacer este gasto, siempre existe la opción de acercarse a  cada una de las ilustradoras a través de redes sociales como Facebook e Instagram, plataformas con la que se han dado a conocer lejos del lugar en el que viven y trabajan. 

Las autoras comparten un elemento en común: se burlan de ellas mismas y de su condición a través de la tinta. Exorcizan sus demonios y sus frustraciones creando personajes con los que fácilmente se puede identificar cualquiera (sin importar si son hombres o mujeres); ya que las autoras no están contando historias alucinantes que se desarrollan en planetas extraños. Narran situaciones por las que todos han pasado y la forma en la que lo hacen representa un respiro para el lector.