La invención de Shakespeare: suspicacias 

León, Guanajuato

Literatura

La invención de Shakespeare: suspicacias

Por Luis Meza   14/10/14

¿Y si Shakespeare fue en realidad alguien que accedió a firmar como suyas, obras escritas por otras personas que deseaban permanecer en el anonimato? Fue Voltaire quien dijo: “Si Dios no existiera, sería necesario inventarlo”. En el caso de William Shakespeare no sólo cabe esta expresión, sino que muchas personas han aceptado sin reservas que es, una invención.

 

La historia no ayuda mucho. Se tiene apenas lo elemental en cuanto a los datos biográficos de Shakespeare (Stratford-upon-Avon, 1564-1616); se sabe que fue hijo de un comerciante y concejal del ayuntamiento venido a menos; que se casó a los 18 años de edad y tuvo tres hijos.

De repente aparece en Londres, se vuelve actor y dramaturgo de una compañía teatral; se retira tras un incendio que consume todos sus manuscritos y la primera compilación de sus obras, el First Folio, aparece póstumamente gracias a los oficios de sus compañeros.

Ese panorama con tanto huecos ha sido un campo fértil para los aficionados a las teorías conspiratorias que han especulado con la posibilidad de que el bardo de Avon haya sido en realidad un “hombre de paja”: alguien que accedió a firmar como suyas, obras escritas en realidad por otras personas que deseaban permanecer en el anonimato.

Uno de los más añejos sospechosos es Christopher Marlowe (1564-1593), quien ya era un escritor de prestigio para cuando Shakespeare empezó a trabajar en Londres. Marlowe murió en una riña en 1593, justo antes de que empezaran a verse representados los trabajos de su colega, circunstancia que ha alimentado sospechas, como la de que el autor de Tamburlaine the Great fingió su muerte para huir de una intriga política y siguió escribiendo en secreto.

Como indicios, los partidarios de esta teoría señalan que Shakespeare no tuvo acceso a la educación universitaria, los viajes, el conocimiento histórico, el dominio de varios idiomas y el roce aristocrático que sí tuvo Marlowe; lo que hace a éste último un candidato más creíble para ser el autor de obras que requieren un amplísimo bagaje cultural y un vocabulario de casi 30 mil palabras.

Edward de Vere (1550-1604), conde de Oxford, es otro de los personajes que se han barajado como autores de gran parte de la obra de Shakespeare. Esta versión es recogida en la película Anonymus (2011), dirigida por Roland Emmerich y protagonizada por Rhys Ifans y Vanessa Redgrave.

Una teoría más sofisticada plantea que el legendario autor fue una invención de una amplia operación nacionalista de unificación de la lengua inglesa, en la que además de los ya citados Marlowe y de Vere, participarían también Francis Bacon, William Stanley y Sir Walter Raleigh.

Si bien ninguna de estas teorías ha alcanzado a desmontar la figura de Shakespeare, tampoco son cosa del pasado. Actualmente está vigente la Declaración de Duda Razonable, una petición formal para hacer que los cuestionamientos sobre Shakespeare sean admitidas como un campo académico formal y no mera especulación. Esta petición, que al momento lleva recolectadas más de 3 mil firmas, es abanderada nada menos que por uno de los grandes actores shakesperianos del Reino Unido: Sir Derek Jacobi.

 

 


Historias Populares
Historias Recientes

Instituto Cultural de León

Oficinas Generales
Edificio Juan N. Herrera s/n
Plaza Benedicto XVI, s/n
Zona Centro
León, Guanajuato, México.

E-mail: prensaicl@gmail.com
Teléfonos: (477) 716 4301 - (477) 716 4899